El secreto de tus ojos

El secreto de tus ojos es una gran película. No es una buena película de género, no es un trabajo eficaz. Es una gran película.

Invitados por la asociación Darín. What else? que preside mi mujer, la vimos ayer junto al amigo cinefrick, a mi hermanito cinéfilo y a mi cuñada. Cien por ciento de ese focus group casero quedó encantado con la película. Por supuesto, pese a algunas reticencias iniciales generadas por los celos no del todo infundados del marido de la presidenta, todos nos afiliamos a la asociación, aunque participaríamos sin inconvenientes en el club de fans de Soledad Villamil y el de Guillermo Francella. Todas las actuaciones, incluyendo los personajes ínfimos de 2 segundos o incluso Pablo Rago, son buenas. La dirección de actores fue siempre una de las cualidades de Campanella pero esta vez logra algo casi milagroso.

Todo, desde el arte (excelente, a la altura del de Zodiac) la música, los diálogos, la fotografía, impone un ritmo que atrapa desde el primer momento.

El guión, de relojería, tiene algo de la excelente Nueve reinas de Bielinsky, aunque sin su componente mecánica. Es una historia perfectamente armada, bien contada, ambientada en Buenos Aires y desarrollada a lo largo de dos décadas, incluyendo los años de plomo, pero que milagrosamente no intenta educarnos, no nos explica que los argentinos somos así, que la vida carajo o que la tarea de cada director es denunciar injusticias. Es una película de un amante del cine que descree del prestigio del tedio.



Nota informativa 1 : Antes de la proyección pudimos padecer en familia el trailer de El hombre que corría tras el viento, película humorística con el cómico ibérico Ismael Serrano. Un bestiario del peor cine argentino, con frases intensas (todo principio no es más que una continuación o la inversa, ya no se o el libro de los acontecimientos se encuentra siempre abierto a la mitad), diálogos ampulosos, casi embalsamados y música a cargo del conocido cantautor. No faltan paisajes patagónicos, tango, lluvia y momentos de profunda humanidad.

Según nos informaron fuentes inobjetables, el trailer fue pagado por Campanella para acrecentar, por contraste, la euforia de su público. Fue una jugada hábil.

Nota informativa 2: No tengo la manor idea de por qué la imagen de youtube sobrepasa el marco de la página. Temo pedirle ayuda a nuestro soporte técnico ya que suele contestarme en arameo, idioma que ya no manejo con fluidez.

La frente marchita

¿Cómo se llaman los responsables de sobreimprimir los logos, la hora, las publicidades y carteles varios a la pantalla televisiva? Supongo que hay gente encargada de eso, formada en el arte de la composición, el equilibrio y la armonía de las formas y, especialmente, el respeto por el trabajo ajeno. Supongo que la persona que en el Canal Volver ocupa esa silla hoy debe estar perdiendo el sueño pensando en las aberraciones visuales a las que está obligado/a a ponerle la firma para promover al mismo canal y a sus emisiones mientras, por debajo, una película argentina trata de hacerse lugar para contar una historia. Porque alguien (¡otro cipayo enemigo de cine nacional!) tiene que estar obligando a este profesional a meter, al mismo tiempo, la hora (abajo a la izquierda) sobre un innecesario plano celeste, al mismo tiempo que los anuncios sobre la película que está, la que viene, y la que ya pasó (arriba a la izquierda, sobre un gigantesco plano blanco) y el insólito logo de Volver (en el medio, a la derecha, molestando siempre) ahora animado con unos fuegos artificiales que festejan sin parar el 15 aniversario de la señal.

Ni siquiera las películas en widescreen (como "Nacido y Criado", hace dos días), con sus barras negras arriba y abajo, se salvan de la invasión de toda esta información, generalmente, innecesaria.

Así es que, mientras los ecos del taquillazo propinado por la nueva película de Darín inundan los suplementos de Espectáculos y, seguramente, la boca de más de un funcionario-yo-te-dije; mientras la Asociación de Cronistas ya se prepara para regalarle a Campanella un Favio Special el año próximo; mientras el cine nacional entero siente renacer sus esperanzas de tener buenas críticas y, sin embargo, llenar salas, mientras todo esto sucede a la luz de la preprimavera porteña, una siniestra conspiración en contra del cine argentino (¡una más!) se teje en las sombras de una sala de edición, a manos de un...

Parque Via

Parque Via, película mexicana que se exhibió en el último BAFICI es un caso extraño. Como escribió en Otros Cines Josefina Sartora es una película que experimenta con un mix entre realidad y ficción de manera ejemplar, muy al gusto de los festivales y de la nueva critica, con un minimalismo riguroso. Hay algo justamente demasiado prolijo, como esas obras que uno siente que han sido realizadas para ser expuestas en una galería de arte y cuyos trazos reflejan la voluntad del autor de seducir al galerista.

El personaje principal es una casa vacía más o menos modernista cuidada por un empleado taciturno. La fotografía es excelente así como la actuación del cuidador cuyos gestos mecánicos no carecen de humor. El mundo exterior en el que este se aventura cada vez menos, es aterrador. La televisión, bloqueada en una especie de Crónica TV local, ofrece durante cada almuerzo noticias tan sangrientas como irrelevantes.

El tiempo se mide a través de las visitas de una prostituta, las de la aristocrática dueña del lugar y las más esporádicas de una agente inmobiliaria que descree de la posibilidad de vender la casa, despues de tanto tiempo de espera.

El tedio algo mecánico de la primera parte potencia el sorpresivo final, probablemente lo más interesante de la película y también lo que rompe con aquel mix demasiado previsible señalado en Otros Cines.

HC y los mejores sitios web para el cineasta

Desde la aparición del último número de la revista Haciendo Cine nuestro call center voló por el aire. Miles y miles de fans se solidarizaron con 791 frente a la injusta ausencia de nuestro sitio en la sospechosa lista de sitios web publicada por la conocida revista de cine. Algunos llegaron incluso a argumentar que Facebook, uno de los sitios mencionados, no se puede considerar seriamente una página de cine o que no hace falta publicitar la base de datos IMDB conocida por todos, incluso por los estudiantes de cine.

Las malas lenguas mencionan el penoso incidente del robo de pizza durante la inauguración del Arte Cinema (que denunciamos oportunamente en este blog y que tuvo a los directores de la revista como responsables directos) como la causa de esta feroz censura.

El licenciado Nestor Pitossi, nuestro representante legal, ya ha contactado al INTA, al INADI, al INCAA y al INCA KOLA.

Por nuestro lado esperamos organizar en los próximos días una manifestación-piquete multitudinaria en la sede de la conocida revista para reclamar no solo por nuestros derechos vapuleados sino por el respeto más elemental a la libertad de prensa, a la libertad de conciencia y también a la de vientres.



Firman: Rabino Blumberg, Ethel Rojo, Gogó Andreu, James T. Kirk, Joe DiMaggio, Elisa Carrió, Ruben Peuchele (El Ancho), mi tía Chola, Castriota y Pozzetti, Los Beatles (siguen las firmas)...

My Winnipeg

Hoy estrenamos en la ya legendaria sala 791 My Winnipeg, el fabuloso film del canadiense Guy Maddin.

Así como Terence Davies no filmó Liverpool sino algo bastante distinto, el recuerdo de su ciudad natal, Maddin nos ofrece una alucinación de su propia ciudad, Winnipeg, una especie de última estación antes de la nada. Retomando sus propias palabras, la película fue encarada como una forma de cumplir los deseos y temores de su infancia.

El resultado es una mezcla de pesadillas, recuerdos infantiles, inventos e imagenes recurrentes en la obra de Maddin como la terrible madre castradora (interpretada por la luminosa Ann Savage) vistos a través del vidrio alucinado de su memoria. También hay algo, aunque felizmante muy poco, de eso que muchos directores tienen sobrevalorado y que se llama realidad.

My Winnipeg es un documental sobre el laberinto de la memoria y si bien destila melancolía (cosa que en 791 siempre agradecemos) no se trata de un ejercicio vano sobre el tiempo ido visto desde un presente aséptico. Por el contrario lo que propone Maddin con infinita gracia y un humor sutil es que el pasado es, irremediablemente, nuestro propio presente.

Exclusivamente Sala 791 / Complejo Arte Cinema (Salta 1620):
16.20 – 18.00 – 19.40 – 21.25 hs.

PS1: Como es casi costumbre recomiendo el artículo de Luciano Monteagudo y el del amigo Batlle en OtrosCines así como la entrevista a Guy Maddin en Página 12.

PS2: Quien deje pasar esta perla será condenado a ver las 24.372 diapositivas de infancia de perez en el living de la casa familiar de Bella Vista (sus padres guardan con ternura desde hace años un viejo proyector carousel Kodak para la ocasión).

Condorito

La foto a la izquierda muestra a Favio, su actor Hernán Piquín, el gorro fluorescente de Favio y, detrás, un desconocido durmiendo.
La escena pertenece a la entrega de los premios Cóndor de la Asociación de Cronistas anoche, donde Aniceto recibió 9 premios mientras mucha gente, incluso en las primeras filas de la platea, se quedaba dormida.

La ceremonia empezó con un discurso de la presidenta del INCAA, seguida de un anuncio de Tristán Bauer (el lanzamiento de un canal para cine argentino), y después la seguidilla previsible de premios para la película de Favio, los agradecimientos a Favio, la palabras de Favio, y un sinfín de premios a la trayectoria.

Previsiblemente también, tratándose de los Cronistas, las películas de Martel y Llinás se llevaron apenas un premio cada una. Historias Extraordinarias, de hecho, formó parte de una categoría nueva llamada "Premio a la Innovación Artística", lo que hace pensar (o más bien confirma) que la innovación artística no es algo que la Asociación pretenda del resto de las ternas.

Entre muchos otros, sobresalió un momento bizarro. En medio del clip In Memoriam, dedicado a las figuras del cine fallecidas en el último año, aparecieron no sólo Fernando Peña y Mario Benedetti, si no incluso...¡David Carradine! Michael Jackson y Farrah Fawcett, imagino, quedarán para la próxima edición.